¿Sueles resolver el misterio antes que el detective de las novelas?
Habitualmente, cuando leo la reseña de una novela de misterio, encuentro uno de estos dos comentarios:
- No fui capaz de averiguar quién era el culpable.
- Vi venir al culpable desde mucho antes.
Algunos lectores consideran este elemento como algo de gran relevancia a la hora de decidir si una novela de misterio les ha gustado. Al fin y al cabo, los que leemos estos géneros jugamos, en gran medida, a resolver el crimen antes que el policía, ¿o no?
¿Qué es lo que hace que una novela de misterio sea tan adictiva?
Empecemos por el principio, lo que hace que una novela de misterio sea tan adictiva es el suspense. La duda por resolver el crimen es lo que nos mantiene pegados a las páginas, deseando saber quién es el asesino o qué va a pasar a continuación. Por eso, resolver el misterio antes que el protagonista puede tener un impacto negativo en la experiencia lectora de una novela de suspense.
Si a mitad del libro ya sabes quién es el asesino, ¿qué te queda por leer?
Por eso, una buena novela de misterio debe tener más atractivo que la mera resolución del caso., Los lectores no deben quedarse en esa pregunta, sino disfrutar del camino que nos lleva hasta la respuesta. Las pistas, los sospechosos, la investigación…
¿Una novela es peor si somos capaces de descubrir al asesino antes que el protagonista?
Si bien es cierto que el suspense es un factor importante en las novelas de misterio, también lo es la calidad de la trama y la capacidad del autor para crear personajes complejos y una ambientación adecuada. Si una novela es buena en todos estos aspectos, ser capaz de resolver el misterio antes que el protagonista no la convierte en una mala novela.
También hay que tener en cuenta que cada lector es diferente y lo que para unos puede ser predecible, para otros será una gran sorpresa. Algunos lectores son capaces de detectar las pistas que el autor va dejando a lo largo de la novela, mientras que otros siguen la trama y se sorprenden con cada giro.
Hace tiempo hablaba de en qué se parecen los géneros literarios y las croquetas, y explicaba que, tanto en uno como en otras, en la variedad está el gusto y está bien no limitarse siempre al mismo sabor (género), porque acabas reconociendo los trucos de la receta y ya no te sorprende.
Como lectora y escritora de novela negra, suelo anticipar la resolución del crimen antes del final, pero eso nunca me ha afectado a la hora de decidir si esa novela me ha gustado. Lo único que le pido es que esté bien escrita y que el final sea lógico y coherente con la historia.
Por otro lado, dentro de la novela negra, descubrir al culpable puede ser más importante en un subgénero que en otro.
El culpable en una novela de misterio y un thriller
Un día hablamos de las las 6 tramas de novela negra más habituales y las preguntas que buscaban responder. ¿Quién lo hizo, cuándo, cómo, por qué…?
Una novela de misterio busca descubrir quién lo hizo, ese es su sentido principal, la razón de su existir. ¿Quién hizo esto? Por eso, en una novela de misterio será importante mantener al lector enganchado a esa pregunta. Si ya sabe quién lo hizo desde las primeras páginas, o a la mitad, o antes que el detective, en definitiva, puede que pierda el aliciente por seguir leyendo.
En cambio, en un thriller, puede que sepas quién es el culpable desde las primeras páginas (¿Has leído En el punto de mira 😈?) y, sin embargo, eso no es tan relevante. Lo que importa puede ser el cómo, el porqué u otras preguntas que no impliquen encontrar al culpable.
¿Resolver el misterio afecta a la calidad de la novela?
Para mí, y creo que para todos, la lectura de una novela de misterio siempre será más divertida si no sabemos hacia dónde nos lleva, si juega con nosotros haciéndonos dudar o si nos sorprende por completo con la resolución.
Sin embargo, aun cuando no sucede esto, la novela puede estar tan bien escrita o resultar tan entretenida que igualmente nos dejará satisfechos con la lectura.
Lo importante es que la novela tenga una buena trama, personajes complejos y una ambientación adecuada. Si esto se cumple, ser capaz de resolver el misterio antes que el protagonista no convierte a la novela en una mala novela.
En resumen, ser incapaces de resolver el misterio en una novela negra nos mantendrá pegados a las páginas, generará intriga y nos puede proporcionar una sorpresa final. Resolverlo antes de tiempo, aunque elimine el factor sorpresa, puede no ser tan importante a la hora de apreciar la lectura, si la novela está bien escrita y proporciona otros alicientes.
¿Cuál es vuestra novela de misterio favorita? ¿Fue capaz de manteneros en vilo hasta el final o descubristeis al asesino antes que el protagonista?
¡Contadme!
¡Felices lecturas!
Foto de Maxim Hopman en Unsplash
2 Comentarios
¡Hola, Arantxa! Quizá dependa de la intención del autor. Dentro de las mil formas que toma el género, hay historias para todos los gustos y el juego de descubrir al culpable se da en las novelas de detectives. En Thompson o Cain, por ejemplo, el final es lo de menos.
Como apuntas, lo principal es que te tenga atrapado. Por supuesto hay lectores que parecen Sherlock Holmes y otros que no son capaces de adivinar lo que esconde un huevo, pero sí creo que tiene haber cierta duda en el lector para este tipo de novelas, además de la calidad. Si la historia se basa en la sorpresa final, y esta no es tal, sí creo que hay un demérito de la obra, dado que es a eso a lo que fía su trama.
En mi experiencia lectora solo recuerdo una novela de “sorpresa final” presunta que me resultó bochornosa. Me refiero a La chica del tren, de Paula Hawkins. Me pareció ridícula, porque la autora concibió y diseñó esa novela para lograr “el final más impactante del siglo”, o algo así creo que se decía en publicidad. Algo absurdo por cuanto antes de la mitad de la novela ya se sabe quién es el asesino. Si solo tienes tres sospechosos, y antes de la mitad te cargas uno y haces recaer todas las sospechas en el otro, no hace falta ser Poirot para predecir que el asesino es justamente el tercero.
Sabiendo eso, toda la segunda parte me pareció ridícula y ni te cuento cuando al final comprobé que así era. En este caso, sí creo que afecta a la calidad de la novela, que por otra parte tampoco era nada del otro viernes.
¡Saludos!
¡Hola!
No tengo nada que añadir a tu comentario, coincido plenamente con tus palabras. Además, me ha resultado curiosa tu observación sobre “La chica del tren”, pues no eres el primero que me comenta el desastroso final y el fiasco del misterio. Por no hablar de la calidad general de la obra. Tanto es así que ni siquiera me interesé por leerla, ya que tantos lectores me decían lo mismo. Creo que podemos afirmar, en este caso, que con resolución del misterio o no, en esta sí que afecta a la calidad de la novela.
Un abrazo y gracias por pasarte por aquí