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Querido diario: verano. 17 lecturas y 7 posts

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¡Hola a todos!

¿Cómo estáis? ¿Qué tal estos tres meses postconfinamiento y pre segundo confinamiento? Sé que a muchos de vosotros os costó concentraros para leer mientras estuvimos encerrados, y espero que os hayáis recuperado (sí, recuperado, como si de una dolencia se tratara, porque para nosotros, los lectores, lo es, ¿verdad?).

Ahora que el verano ha finalizado y nos acercamos a un otoño incierto, os traigo, como de costumbre, mi resumen de lecturas y publicaciones durante estos tres meses. Espero que os sirva de ayuda para elegir próximas lecturas y para repasar los artículos que os hayáis podido perder.

¡Vamos al lío!

Mis libros

Sigo agradeciendo los comentarios que mis dos novelas todavía generan entre los lectores, tanto Zed está muerto como En el punto de mira. ¡Muchísimas gracias a todos! Me siento muy halagada de que, tanto tiempo después de su publicación, aún os interesen. ¡Seguid leyendo!

Comentarios de Zed está muerto: Amazon. Goodreads

Comentarios de En el punto de mira: Amazon. Goodreads.

También quiero recomendarte esta maravillosa reseña que publicó la escritora Cristina Grela sobre En el punto de miraHan pasado cuatro años desde su publicación y todavía sigue atrayendo a lectores y cosechando opiniones como esta. ¡No puede hacerme más feliz!

Recuerda que aquí puedes leer los primeros capítulos de Zed está muerto.

Y aquí los de En el punto de mira:

En el punto de mira - Primeros capítulos

Apariciones en televisión

No puedo dejar de nombrar esta breve entrevista que me realizaron para el programa Somos gente fantástica (lo somos, lo somos jjjjj) de la Televisión Canaria. ¡Ya empieza la promoción de mi nueva novela!

¿Nueva novela?

Sí. ¿Que no te habías enterado? Pues lo pongo entre exclamaciones. ¡Nueva novela!

Durante este trimestre he anunciado la publicación de mi próxima novela, que será la tercera novela que publico y la continuación de la saga del Fantasma, iniciada con En el punto de mira.

Os empeñasteis en que queríais saber qué ocurría con Daniel y Kathleen, ese abnegado policía de Scotland Yard y esa infalible asesina a sueldo. Pues bien, yo no pensaba escribir una continuación, pero no tengo fuerza de voluntad. Así que ya llega.

¡Y puedes reservarla ya! La tienes en preventa en Amazon. Cómprala ahora y recíbela el día 8 de octubre.

¿Quieres saber algo más sobre ella?

En este artículo tienes la sinopsis, el booktrailer y algunos detalles más sobre la novela.

Sangre en las manos - el fantasma II - arantxarufo.com

El blog en verano

Como de costumbre, en verano, el flujo de artículos se ralentiza. Aunque en junio y julio mantengo el ritmo de una publicación a la semana, cuando llega agosto las distancio hasta quince días, así que, estos meses, los artículos en el blog son menos que el resto del año.

Lecturas de verano 2020

La piel, de Curzio Malaparte: Esta novela empezó mal, para mí. Malaparte tiene una forma de escribir muy particular, se pierde en divagaciones, introduce diálogos en francés sin traducción (¿lo cualo?), desprende un cinismo que raya lo ofensivo y parece que narra una historia en la que, al contrario de lo que uno pensaría de una Italia en guerra, no pasa nada. Pero en cuanto te acostumbras descubres la maravilla de su pluma y encuentras unos personajes y escenas dignos de ovación. Inolvidable.

Puedes leer mi comentario aquí

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La pareja de al lado, de Shari Lapena: Una de esas novelas que te hacen sospechar de todo el mundo. Una pareja regresa a casa de una cena con los vecinos para descubrir que su hija recién nacida ha desaparecido. A partir de ahí se inicia una investigación en la que todo el mundo parece ocultar algo y hasta quienes más tienen que perder pueden ser culpables.

Puedes leer la reseña aquí

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Quemar los días, de James Salter: No soy especialmente aficionada a las autobiografías, lo reconozco, pero alguien me recomendó esta por la calidad del autor protagonista y no me pude resistir. Menos mal. Quemar los días no es una autobiografía al uso, es un recopilatorio de emociones y anécdotas, como salpicaduras en la memoria, saltos en el tiempo e imágenes inconexas, amigos, amantes y aventuras a bordo de un avión de guerra. Todo escrito con una maestría de poner los pelos de punta. Imprescindible.

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Relatos de una Logan, de Tery Logan: Si antes decía que no soy aficionada a las autobiografías, tampoco es que me lleve demasiado bien con los libros de relato. Lo confieso, necesito historias largas, que me metan a fondo en los personajes, porque, si no, me falta algo. Es lo que me ha ocurrido con los relatos de esta colección, la mayoría de ellos podría (debería) haberse extendido mucho más. Algunos eran interesantes, intrigantes, y deseaba saber sobre sus protagonistas y qué ocurría antes y después. Pero no. Y es que, más que relatos, algunos son microrelatos. Sin embargo, quiero destacar uno de ellos, Enamora2.0. Es muy difícil hacerme reír con una historia, y esta me sacó varias carcajadas. Bien por Tery.

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Las ruinas, de Scott Smith: Ya sabéis lo mucho que me gusta Stephen King, lo cual os puede llevar a suponer que me gusta la literatura de terror. Y es cierto, pese a que King nunca me ha provocado demasiado miedo, así que puedo decir que Las ruinas es una de las mejores novelas de terror que he leído. ¡Qué asfixiante! ¡Qué incómoda! ¡Qué nervios! Los personajes son muy simples, y quizá precisamente por eso resulta tan fácil meterse en su piel (qué literal). Muy recomendable a los que queráis pasar un mal rato.

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El talento de mr. Ripley, de Patricia Highsmith: Cuando has oído hablar tanto de un libro y de la posterior película (aunque no la hayas visto), y has oído tantas alabanzas, no es de extrañar que sientas cierto recelo a la hora de descubrir si es cierto lo que dicen. Es lo que me ocurría con esta historia, que iba posponiendo y posponiendo…

Hasta que, por fin, me puse con ella. Y es, en efecto, una gran historia que habría disfrutado más, no obstante, de no haber sabido nada. Conocer algunos datos del protagonista hizo que la novela se me hiciera larga hasta que se descubrió lo que yo esperaba. Da lo mismo, es una novela estupenda en su trama, en sus personajes y en su ambientación. La parte de Venecia me ha transportado directamente a esa ciudad. Y si eso no vale una lectura, yo ya…

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Se busca una mujer, de Charles Bukowski: Pocas veces encontrarás un título tan bien puesto en una antología como este. Se busca una mujer es una recopilación de relatos protagonizados por un hombre que quiere follar, beber y apostar a los caballos. Y punto. Nada más. Uno tras otro. Puede que seas un gran fan de Bukowski, como yo lo soy, pero creo que estos relatos se disfrutan mejor de manera independiente que en una colección, ya que pueden resultar repetitivos y, por lo tanto, hacer pesada la lectura.

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El signo de los cuatro (Sherlock Holmes 02), de Arthur Conan Doyle: Regreso a mi relectura de la saga de Holmes con la segunda entrega, una novela caracterizada, como todas, por lo misterioso del caso que el detective debe resolver. Puedo destacar en esta ocasión las nuevas pinceladas de la personalidad de Holmes que Doyle nos muestra y la aparición de Mary Marston, una secundaria que ganará en relevancia en las siguientes entregas.

También es interesante el hecho de que El signo de los cuatro desprende un aire quizá más oscuro y tenebroso que su predecesora, con aterradores personajes y algunas escenas dignas de un relato de terror gótico.

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La sangre manda, de Stephen King: Si yo llamo a este hombre “san King bendito” será por algo. En La sangre manda nos presenta cuatro relatos no tan cortos absolutamente maravillosos. Tal y como solo él logra hacer, en tres páginas ya nos hemos acercado a los personajes, y seguimos a un niño encaprichado de un iPhone, a un hombre normal a lo largo de una vida cuyo final ya conocemos, a un escritor que no logra terminar una novela y a nuestra vieja amiga Holly Gibney enfrentándose al horror, una vez más. Puede que haya algunos flecos en el desarrollo de alguna de las historias que no me haya terminado de cuadrar, sobre todo en la de Holly, pero la sensación final de este libro es que si yo llamo a este hombre “san King bendito”, será por algo.

Puedes leer mi reeña, aquí

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Territorio Lovecraft, de Matt Ruff: Puedo decir que esta es una de las novelas que más me ha sorprendido en los últimos tiempos. Con ese título, y lo poco que había oído sobre ella, me esperaba una novela de terror. Y sí, pero no, pero sí.

Territorio Lovecraft utiliza un formato de relatos cortos independientes para narrar la historia de una familia afroamericana en los años 50 en Estados Unidos. Y sí, hay fantasmas, hechiceros, viajes interplanetarios y logias de hechiceros malvados, pero lo que más miedo da, con diferencia, es la parte más “real” de la historia, el racismo imperante y aterrador. Los pequeños detalles, la exclusión asimilada, el miedo aceptado como algo normal.

Una historia de terror en la que la parte de terror es la que menos terror da. ¿Me explico?

Aun así, muy recomendable.

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El último trayecto de Horacio Dos, de Eduardo Mendoza: Menuda decepción. Una novela de supuesto humor y supuesta ciencia ficción. La historia de una nave que recorre el universo de estación espacial en estación espacial, gobernada por una panda de oficiales inútiles que transportan a una serie de exiliados de la tierra, delincuentes, ancianos improvidentes (porque a los ancianos hay que expulsarlos de la Tierra ya que no “sirven” para nada) y mujeres descarriadas (descarriadas según quién, no se dice, pero toda la novela apesta a machista por los cuatro costados).

Situaciones de humor rancio tremendamente forzado y personajes absurdos.

Sí, alguna sonrisa me provocó, no voy a decir que no, pero que con menos de 200 páginas se me hiciera largo… mal.

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La voz de la tierra, de Alejandro Moreno Sánchez: Un artista fracasado, un pueblo en mitad de la nada, una familia con un secreto y un hombre en la eterna búsqueda de su padre desaparecido. La voz de la tierra me enamoró con una ambientación impecable, unos personajes bien trabajados y un sentido del humor que contrastaba con la opresión de la historia. Muy recomendable.

Lee mi reseña aquí

Puedes comprarla aquí

Pastoral americana, de Philip Roth: Ganadora del Pulitzer en 1998, esta novela narra la historia del sueco Levov, un estadounidense que parece reunirlo todo para ser un triunfador en la vida. Desde su adolescencia es guapo, admirado, el mejor en los deportes y los estudios, serio, honesto, leal… Sin embargo, su vida no es tan sencilla como podría creer cualquiera que lo vea desde fuera. Y en la historia descubrimos cómo la vida puede dar vueltas sin que uno sea capaz de evitarlo, y cómo las apariencias engañan. Una novela que se hace pesada en algunas ocasiones, pero que cuenta con uno de los mejores protagonistas que he encontrado.

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Crímenes exquisitos (Valentina Negro y Javier Sanjuan 1), de Nieves Abarca y Vicente Garrido: Una novela de contrastes. Por un lado, me gustó mucho la trama principal y también los personajes protagonistas, pero el resto estaba todo mal. Le sobraban 400 páginas y la mitad de las escenas, que no aportaban nada. Larga, lenta, deleitándose en situaciones que no venían a cuenta ni tenían el menor interés. Y ese final… Cogido por pinzas. Sin embargo, repito, la historia y los protagonistas me gustaron mucho. Una de cal y otra de arena

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Ya no quedan junglas adonde regresar, de Carlos Augusto Casas: Una de las mejores novelas que he leído este año. Directa a mi TOP de diciembre, no te digo más. Directa, brillante, con un humor negro salvaje, unos personajes inolvidables y una trama que no te permite respirar. Léela. Ya.

Próximamente, reseña. Prometido.

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Zombie, de Joyce Carol Oates: Una novela corta e incómoda. La autora nos mete en la cabeza de un psicópata enfermo mental, obsesionado con convertir en zombie a cualquier chico que le resulta atractivo, y a través de sus pensamientos y obras, aprovecha para reflejar una sociedad en la que no todas las vidas valen lo mismo ni a todos nos juzgan por el mismo rasero. Muy recomendable.

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Hasta aquí mi repaso al verano de 2020.

¿Y vosotros, qué habéis leido en estos meses? ¿Qué novela me recomendáis?

Felices lecturas, y hasta pronto

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