El niño en la nieve, de Samuel Bjørk
Invierno de 1999. Un hombre regresa a casa. Está oscuro, hace frío y su coche avanza por una carretera solitaria. De repente, los faros iluminan algo que parece un animal. El hombre pisa el freno con decisión. Frente al vehículo encuentra a un niño en shock, casi congelado. Sobre la cabeza lleva una cornamenta de corzo.
Catorce años después, una mujer es brutalmente asesinada en un lago de montaña. En un plazo de tres semanas, tres personas han muerto. En cada ocasión, el criminal ha dejado una pista invitando a los investigadores Holger Munch y Mia Krüger a un juego mortal. Comienza una carrera contrarreloj contra el más peligroso y aterrador tipo de asesino en serie: el que elige sus víctimas completamente al azar.
Lo que sí
- La presentación de los secundarios
- Los constantes cambios de narrador
- Mia Kruger
- Las tramas paralelas
Lo que no
- El final atropellado
- El asesino
- La trama sin cerrar
El niño en la nieve, de Samuel Bjørk. Todo maravilloso hasta el batacazo final.
Empezaré diciendo que esta novela es la tercera de una saga protagonizada por la pareja de policías Holger Munch y Mia Kruger. Yo no lo sabía, porque soy así de despistada, y es lo primero que leo del autor. Pero por si tú tampoco has leído nada suyo antes, no te preocupes. Es verdad que hace algunas referencias a lo ocurrido en las primeras entregas, pero queda bastante claro lo que quiere contar y yo no me sentí perdida en ningún momento. Lo que sentí fue fascinación.
Esta es una de esas novelas del género negro escandinavo que tan de moda se ha puesto desde hace unos años y en el que te puedes encontrar algunas maravillosas y otras… no tanto. El niño en la nieve es de las primeras. Los personajes tienen una profundidad envidiable, con su pasado, sus traumas, sus dudas existenciales y sus luchas internas. La ambientación es increíble, sin ninguna duda, los paisajes, las ciudades y los pueblos de Noruega son casi un protagonista más. Y, ya que hablamos del tema, el modo en el que el autor presenta a los secundarios me pareció fascinante. Casi en cada inicio de capítulo acompañas a un personaje en un momento concreto de su vida, su rutina, quién es, qué hace y lo que piensa. Y luego resulta que no es más que un secundario, un extra que no aparecerá más, pero al que has llegado a conocer como si fuera el mismísimo protagonista de la historia. Jamás había encontrado una novela que llevara estas presentaciones a tal nivel, y me ha encantado.
La novela se desarrolla en capítulos cortos narrados desde diferentes puntos de vista cada uno; vamos saltando de protagonista y de ubicación, siguiendo cada una de las tramas que narra la historia: el extraño asesino que parece elegir sus víctimas al azar y la mafia de tráfico de drogas en Noruega.
Con giros sorprendentes y adentrándote en las vidas y profundidades de los protagonistas, te enganchas cada vez más hasta que llega el final. Y entonces…
Esto es una opinión mía, totalmente personal y subjetiva, pero el final me pareció un horror. Después de 350 páginas tomándose el desarrollo de la historia con calma, profundizando en los personajes, en los detalles… De repente, como si la editorial le hubiera dicho “Esto se está haciendo demasiado largo”, el autor decide cerrarlo todo en 80. Pim. Pam. Se saca de la manga un asesino sin pies ni cabeza, con una motivación que sí, encaja, vale, pero no viene a cuento en toda la historia, lo cierra en dos escenas y hasta deja tramas sin concluir. Que una cosa es dejar miguitas para una continuación y otra es esto. Decepción total. Esto sí que es un interruptus.
Repito, es una opinión personal, sé de gente a la que le gustó mucho el final, pero no es mi caso. Y tenía que decírtelo.
El autor: Samuel Bjørk
Empecemos diciendo que Samuel Bjørk es, en realidad, el seudónimo de Frode Sander Øien. ¿Por qué necesita un seudónimo? Vaya usted a saber.
Este escritor nació en Noruega en 1969 y además de novelista, es dramaturgo, traductor, músico -con varios álbumes publicados en su país- y pintor. En España podemos encontrar tres novelas de esta saga: Viajo sola, El búho y esta, El niño en la nieve.
La trama
La unidad de élite de la policía, de la que forman parte el capitán Holger Munch y la investigadora superdotada Mia Kruger, fue desmantelada después de su última actuación, y cada uno de sus integrantes ha retomado sus vidas anteriores, en diferentes unidades de la policía. Pero la aparición de un cadáver en circunstancias muy extrañas forzará su reunión. Se trata de Vivian Berg, una bailarina de ballet clásico, que aparece asesinada en mitad del bosque, a cientos de kilómetros de su casa, lejos de cualquier carretera y con aspecto de haber caminado hasta su muerte por su propio pie.
Un segundo asesinato en circunstancias similares confirman lo que nadie en Noruega podía creer, tienen un asesino en serie.
Las víctimas no tienen nada en común, parece que el asesino las elija al azar, y eso, además de no tener demasiado sentido, hace imposible su captura. ?¿Quién, cómo, por qué?
La policía Mia Kruger tendrá que compaginar la investigación de este caso con su propia recuperación física y mental tras la pérdida de su hermana, y con las sospechas que un agente de Narcóticos comparte con ella, pues parece que uno de sus compañeros está mezclado en un feo asunto de tráfico de drogas.
Los personajes
- Holger Munch. El jefe de esta unidad policial de élite es un hombre leal a su gente, responsable con su trabajo, sus amigos y su familia. Ha perdido mucho en la vida, pero no la esperanza de luchar por recuperarlo, y por eso ha decidido hacer las cosas bien.
- Mia Kruger. Esta policía parece tener unos poderes que nadie, ni siquiera sus compañeros, terminan de comprender. Simplemente viendo una fotografía o un escenario, se da cuentas de detalles del crimen que han pasado inadvertidos para todos los demás. Pero esta habilidad tiene un coste, Mia tiene un trauma, una adicción que intenta superar y mucho cansancio encima.
En resumen: El niño en la nieve
Sé que dije lo que dije sobre el final de esta novela, pero no quiero que te quedes con la impresión de que no la recomiendo. Todo lo contrario. Me encantó El niño en la nieve, y te la recomiendo sin dudar. De hecho, yo ya he apuntado las dos entregas anteriores en mi lista de lecturas pendientes, aunque sea un poco raro leerlas conociendo el final. Pero es que leer a Samuel Bjork ha resultado un placer. Sin más.
Magníficos protagonistas, magníficos secundarios, magnífica ambientación y giros. Magnífico misterio a resolver. Un único fallo no arruina todo esto.
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Un abrazo, y felices lecturas.
