Cuando hablamos de novelas de terror, todos pensamos, más o menos, en los mismos referentes; aunque no seas aficionado al terror gótico, si hablamos de novelas terroríficas, pensamos en vampiros, fantasmas, casas encantadas y, por supuesto, cementerios. Con o sin niebla. Mejor con ella. Por supuesto.
Y es que los cementerios son origen de casi todos los monstruos y seres aterradores, desde los vampiros que se levantan de su tumba con sed de sangre a los zombis que siguen el mismo camino, con más hambre que sed, y los fantasmas incorpóreos que se niegan a permanecer bajo tierra, y menos si pueden colarse en alguna de estas 5 bibliotecas encantadas por todo el mundo.
El cine y la literatura nos han enseñado a no construir casas sobre cementerios y a no fiarnos de que lo que se entierra en ellos vaya a permanecer allí para siempre.
Por eso, hoy vamos a repasar 5 historias de cementerios que no querremos visitar.
5 historias de cementerios que no querremos visitar
El cementerio, de Robert David Chase, Ed y Lorraine Warren
Yo, es leer los nombres Ed y Lorraine Warren, y ya me entra el mal rollo. Algunas de las películas basadas en las supuestas aventuras reales de esta pareja me han dado muy mal yuyu, y no hace mucho descubrí que también han publicado libros con sus experiencias.
Uno de ellos es este, El cementerio, una colección de casos reales de apariciones de fantasmas y acoso demoníaco, encuentros sobrenaturales e historias de ultratumba; historias que ocurrieron muy cerca de cementerios o incluso dentro de ellos y que, al contrario de otras novelas y relatos que vamos a ver a continuación, hablan de cementerios reales con historias que, supuestamente, también lo son.
Mal yuyu.
En la cripta, H.P. Lovecraft
Ya comenté una vez que este es uno de los 5 libros que más miedo me han dado y, como queda claro en su nombre, se desarrolla en una parte concreta de un cementerio.
En la cripta relata la historia de un sepulturero insensible y muy mala gente, que maltrata a los fallecidos y los entierra en ataúdes de baja calidad para ahorrarse el dinero. No digo más, pero tratándose de un relato de Lovecraft, y uno de los más impresionantes que he leído, ya os podéis hacer una idea de cómo sigue.
El entierro, de Lord Byron
Nos vamos a los orígenes de las novelas de terror y nos encontramos con El entierro, de Lord Byron, el primer cuento conocido sobre los vampiros.
En esta historia, Byron narra un viaje por Europa con destino a un cementerio en el que, según ciertas cábalas mágicas, el protagonista debe morir. El narrador de la historia, compañero de este hombre con tan aciago futuro, se hará cargo de su misión tras la enfermedad de aquel. Un cementerio como destino y un entierro en el horizonte. Y la pluma de Lord Byron. Los pelos de punta.
El entierro prematuro, de Edgar Allan Poe
Otro maestro del terror, al que ya dediqué una de mis noches de halloween, no podía no aparecer en este listado.
Edgar Allan Poe narra en esta historia de cementerios la dramática enfermedad de un protagonista anónimo que sufre catalepsia. No es de extrañar que el pobre hombre sienta pánico ante la posibilidad de que, en uno de esos ataques, lo den por muerto y lo entierren vivo. Y esto sirve como excusa para repasar una serie de casos de personas que han sufrido esta tragedia.
No lo quiero ni pensar.
Cementerio de animales, Stephen King
¡Sorpresa! Bueno, no. Dudo de que os sorprenda ver aquí a san King bendito con su novela Cementerio de animales. Por muy lejos que esté del terror gótico, esta es una historia de cementerios clásica y no podía faltar.
Aunque no son las personas enterradas en este cementerio las que dan miedo, ni la posibilidad de ser enterrado en él. En Cementerio de animales, son las mascotas quienes regresan de ultratumba, zombis y hambrientas, en una confabulación que nos recuerda eso de que no debemos vivir cerca de un cementerio, sin importar qué clase de seres descansen en él.
Hay quien lo considera el libro más aterrador del maestro King.
Miedito del bueno.
¿Has leído alguna de estas historias de cementerios? ¿Conoces alguna otra?
Aprovecha que estamos en Halloween y no dejes de compartir tus historias de terror.
Y si te apetece alguna lectura tenebrosa para estos días, te invito a pasar una noche de Halloween con Ray Bradbury, con Edgar Allan Poe o con H.P. Lovecraft. ¿Te atreves?
¡Un abrazo zombi y felices lecturas!
❤
